Cuando trabajemos con personas con discapacidad visual, desde el ámbito de la educación física, debemos tener en cuenta algunos aspectos importantes. Estos aspectos son:
- El momento de aparición de la ceguera o discapacidad visual. Puede ser ceguera congénita (de nacimiento) o adquirida por un accidente o una enfermedad. Por ejemplo, no va a ser lo mismo que hablemos de colores para personas que los han visto a personas que no los han visto.
- La actitud de la persona hacia su limitación.
- Posible progresión de la enfermedad.
- La existencia de anomalías asociadas. Como por ejemplo, marcha mucho más plana, problemas de coordinación y posturales, medicación que se pueda tomar esta persona.
- La importancia de la estimulación y atención temprana; como el trabajo vestibular, equilibrio, postural, el trabajo con el sonido...
Las personas con discapacidad visual o ceguera presentan un mayor retraso del desarrollo motor. Esto va a conllevar a una dificultad a la hora de las habilidades de comunicación, adaptación social, comprensión verbal, lenguaje expresivo...
Estos sería los factores generales de atraso del desarrollo motor (según Hill y colaboradores:
- Retrasan el desarrollo -> imposibilidad de usar la vista como estímulo para el movimiento.
- Menor cantidad de oportunidades para el movimiento (menor oportunidades de explorar el entorno) -> ya que la percepción del espacio es más restringida.
- Retraso en los movimientos de dirección y orientación-> cuando tenga una percepción auditiva de donde quiera moverse lo hará.
- La sobreprotección del entorno familiar-> por miedo a accidentes.
- Incapacidad para la imitación.
- Pueden mostrar una menor confianza de sus capacidades.
- Falta de integración sensorial-> ayuda al equilibrio
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